Los perros Beagle son conocidos por sus grandes reservas de energía a menudo desatada contra los objetos preciados de sus amos. Esto ocasiona que muchos dueños de perros Beagle opten por encadenar a sus mascotas con el fin de evitar que sigan destrozando.
En este post te contamos por qué encadenar a tu perro Beagle no solucionará el problema y qué consecuencias tiene esta practica tan negativa.
Tristemente, todos hemos escuchado de perros que viven “encadenados”. las causas más comunes por las que los dueños encadenan a sus perros van desde un comportamiento violento o destructivo por parte del perro e incluso algunos perros son amarrados con la intención de que aprendan donde deben hacer sus necesidades.
Esta práctica tiene efectos físicos y mentales negativos en el perro y es considerado por muchos animalistas (y en muchas jurisdicciones) como maltrato animal.
La triste historia de muchos Beagles
A menudo las compras impulsivas nos llevan a adquirir un perro del que no conocemos nada, tal es el caso de muchas compras de perros Beagle. Hemos sido bastante enfáticos al manifestar que esta raza de perro en particular cuenta con unas reservas de energía bastante amplias y, cuando no logra agotar su energía durante el día, durante la noche se desatará contra todo lo que se vea “potencialmente masticable”.
Muchos dueños despiertan a la mañana siguiente con sus sofás mordidos, cojines destrozados e incluso la mayoría de Beagles destrozan sus propias camas para perros. Sin duda ver tus bienes preciados en ese estado puede encolerizar a cualquiera.
Y, llenos de ira y con la creencia de que es “la única opción viable” amarran a sus perros donde “no puedan destrozar nada”.
¿Qué sucede cuando encadenamos a un perro Beagle?
No hay que olvidar que los perros Beagle son “sabuesos”, lo primero que sucederá en cuanto encadenes a tu perro será un concierto incansable de ladridos y llanto. A los Beagles no les gusta estar amarrados, mucho menos estar lejos de los otros miembros de la familia ya que son propensos a sufrir de ansiedad por separación.
Luego de que el perro note que el llanto y los ladridos no parecen conmover tu corazón, y sin dejar de ladrar, intentará romper su correa de cualquier forma. A menudo esto termina en una correa completamente destrozada o lo que es peor, heridas en su cuello y boca.
Muchos dueños incluso recurren a collares anti-ladridos, los cuales no funcionan en perros de tipo sabueso y solo causan dolor e incomodidad porque, mientras esté amarrado no dejará de ladrar.
Con el tiempo, y si el perro permanece no solo amarrado sino también excluido y sin contacto con otros miembros de la familia, desarrollará conductas violentas o incapacidad de relacionarse sanamente con otros perros o humanos.
El resultado será un perro incapaz de relacionarse, con conductas violentas, con los ladridos como medio de comunicación y aun así será un perro destructor. Ya que nunca aprendió a no serlo, simplemente fue excluido de su familia.
Cómo puedes ver, amarrarlos no elimina el problema, solo te aparta de la posibilidad de crear una sana relación con tu perro además de que te expones a problemas legales. Mantener a un perro encadenado no solo es un acto cruel, sino que también es considerado maltrato animal en muchas partes del mundo. Y, como tal es un acto punible.

¿Encadenar a un perro es legalmente considerado como maltrato animal?
Es gratificante ver que, con forme pasan los años, nuevas leyes de protección animal son promulgadas en todo el mundo. En la mayoría de ellas, encadenar a un perro es considerado como maltrato animal y el dueño enfrentaría multas, así como el retiro del animal con el fin de restaurar sus derechos.
Aquí te dejamos links con las leyes de protección canina de los principales países de nuestros lectores:
México: Ley de protección a los animales del distrito federal
España: Convenio europeo para la protección de los animales de compañía
Colombia: Guía para manejo de denuncias de maltrato animal
Perú: Ley de protección y bienestar animal
Costa Rica: Ley de bienestar de los animales
Argentina: Ley 14346 Malos tratos y actos de crueldad a los animales.
Encadenando a un perro incurres en el delito de maltrato animal y, cualquier persona puede denunciar este comportamiento negligente ante la autoridad competente.
¿Qué consecuencias trae encadenar a un perro?
Incluso si sólo está encadenado por cierto tiempo, esta practica causa daños permanentes en el aspecto físico y mental del perro.
Hoy en día, con todas las posibilidades de entrenamiento es casi que innecesaria la correa, salvo en casos donde el perro estará en la calle o es propenso a perseguir. En estos casos el uso de la correa está justificado por el bien del perro. Por otro lado, en los otros momentos, las correas son más que innecesarias.
Las cadenas o correas tienen la posibilidad de provocar inconvenientes físicos como estrangulamiento e incluso en climas fríos los exponemos a congelación. Si el perro permanece en el jardín amarrado es más propenso a sufrir deshidratación sin que nadie se dé cuenta.
Durante el verano, la insolación es un riesgo real y las picaduras de insectos además son un inconveniente molesto. Los cachorros, los perros ancianos y los perros de pelo corto son especialmente propensos a tener inconvenientes de salud. Otro problema de tener encadenados a nuestros perros es que se vuelven sedentarios. Al no tener la posibilidad de estirar las piernas y correr incrementan los riesgos de obesidad.
Un perro encadenado no puede defenderse de atacantes humanos u otros perros, si la correa o cadena se enreda en su cuello, el perro puede quedar atrapado e inclusive fallecer ahorcado. Al intentar liberarse de la cadena puede ocasionarse heridas con la posibilidad de generar infecciones graves.

Mantener un perro atado afecta su comportamiento
Mantener encadenado a un perro puede provocar efectos psicológicos y físicos. Si estás solo en un espacio frío y confinado en un radio de seis pies todo el día, tu cordura puede padecer bastante, ¿verdad? Lo mismo les sucede a los perros.
Tu tarea como dueño no se limita a brindar comida y un espacio, los perros requieren amor, dedicación y compañía. Lamentablemente, gracias a las malas condiciones de vida, los perros encadenados en ocasiones atacan a la gente. Estos perros tienden a volverse agresivos ya que es la única forma de defenderse estando atados. Además, tienden a volverse territoriales y defender el poco espacio que tienen.
¿Qué hacer si mi vecino mantiene atado a su perro?
El primer paso es identificar si el perro se encuentra constantemente atado, si esta en condiciones de maltrato e intentar registrar estas evidencias. Luego podrás reportarlo a la entidad competente en tu país.
Si tu conoces a tu vecino, y sabes que quizás peca al encadenar a su perro porque desconoce de otros métodos para corregir el comportamiento del canino, podrías intentar ayudarlos a ambos. A menudo muchos dueños responsables acogen perros mientras sus dueños reales superan problemas o establecen medidas para brindar un mejor lugar a su perro.