
¿Tu perro Beagle persigue todo lo que se mueve y temes que pueda escapar o perderse? El instinto de caza de los perros Beagle no se puede eliminar por completo. Sin embargo, puedes entrenar a tu perro para que aprenda a controlar mejor sus impulsos.
Lo primero que tienes que saber es que, los perros Beagle disfrutan cazar, perseguir… está en su ADN. Por lo cual, si quieres ir en contra de “natura” y enseñarle a tu peludo cazador que los conejos, gatos e incluso otros perros son “amigos, no comida” debes tener paciencia.
¿Por qué los perros Beagle cazan?
El instinto de caza está en la sangre de los perros. Incluso si han sido domesticados por los humanos durante miles de años, ellos siguen siendo depredadores.
Para entender el comportamiento “cazador” de nuestros Beagles, veamos qué nos dice la historia:
El ancestro salvaje de nuestros perros, el lobo , cambia su comportamiento de caza a lo largo de su vida. Los lobos jóvenes cazan cualquier cosa que se mueva, cazan por diversión. Los lobos adultos cazan por alimentación, por supervivencia.
Los perros no tienen que cazar para sobrevivir. Por lo tanto, se comportan de manera similar a los lobos jóvenes. Cuando los perros persiguen a una “presa”, están siendo guiados por su instinto de diversión, su cerebro libera endorfinas que generan placer. Por lo cual, la caza es un comportamiento auto-gratificante.
Y, como todo lo que nos genera placer, si no se previene o no se limita puede volverse adictivo.

¿Qué comportamientos podemos permitir y cuales debemos corregir?
Los perros Beagle tienen un fuerte instinto de caza, por lo cual, no podremos eliminar completamente el instinto. Lo que si podemos hacer es corregir los comportamientos nocivos. La caza no solo consiste únicamente en perseguir a una “presa” sino que también puede ser:
- Ubicar
- Acechar sigilosamente
- Perseguir
- Lamer
- Cazar
Ubicar y acechar no representan un problema de comportamiento. Puede que nuestros perros se sienten en un extremo de la habitación a “vigilar” al gato, pero no lo atacan corren tras él. El instinto de caza es un problema cuando deciden correr tras del gato u otro animal y éste se siente amenazado al punto de defenderse del “ataque”.
¿Por qué debemos controlar el instinto de caza?
Debemos corregir a nuestro perro para que no represente una amenaza para él o para los demás. Puede parecer divertido cuando persiguen otros perros, mascotas como gatos, conejos o gallinas, pero no lo será si estos animales se sienten amenazados y responden ante la cacería. Muchos perros Beagle incluso persiguen coches, ciclistas y corredores.
También es problemático si persiguen animales salvajes, como liebres o ciervos. La “caza” los puede llevar hasta la carretera, donde los conductores y los propios animales pueden resultar heridos.
¿Qué debemos hacer?
Las prohibiciones por sí solas no sirven de nada, porque el comportamiento de caza es instintivo. Sin embargo, podemos fortalecer los otros comportamientos instintivos y necesidades, de modo que el instinto de caza quede en segundo plano. Eso significa:
- Entrenarlos en el control de los impulsos y la tolerancia a la frustración.
- Practicar la obediencia básica con entrenamiento.
- Fortalecer el vínculo a través de juegos conjuntos.
- Fomentar el entrenamiento de orientación.
Sin duda esto requiere de mucha paciencia y constancia, pero debemos asegurarnos de que las sesiones de entrenamiento no aburran a nuestro perro. Ya hablamos en otro post acerca de que el aburrimiento es a menudo la causa del comportamiento destructivo en los perros Beagle.
¿Qué ejercicios podemos aplicar en casa?
El objetivo es que tu Beagle desarrolle comportamientos alternativos que sean más divertidos para él que cazar.
- Siempre que tu perro esté en modo “cazador” y sea difícil de controlar, intenta sacarlo a pasear con la correa puesta. Caminar contribuye a liberar la ansiedad que les produce el instinto.
- Durante los entrenamientos, optemos por entornos tranquilos. En definitiva, no podremos entrenar a nuestro perro Beagle a NO perseguir, si el gato está cerca incitándolo a correr tras él. Debemos comenzar con entornos fáciles hasta probarlo en entornos complicados.
- Obsequiar juguetes con movimiento. Muchos juguetes para perro tienen incorporados sensores de movimiento, precisamente para que el perro corra tras ellos. Así como les enseñamos a diferenciar entre nuestros objetos preciados y sus juguetes, el perro aprenderá a diferenciar entre lo que SI puede perseguir y lo que NO.

¿Cómo controlar el instinto de caza durante los paseos?
El paseo debería ser un momento hermoso entre un perro y su dueño, pero esto puede verse opacado si el perro todo el tiempo esta tirando de la correa. Si al pasear tu perro está más interesado en perseguir a otros perros que en pasear a tu lado, debemos cambiar nuestra estrategia.
Como mencionamos anteriormente, los cachorros y perros adultos encuentran placer al perseguir. Si durante el paseo incluimos juegos de pelota, nuestro perro encontrará mas “placer” al compartir con nosotros que al intentar perseguir a otros perros o personas.
Esto hace parte del entrenamiento que lleva a independizar a nuestros perros de la correa. Si no ayudamos a nuestro perro a superar su instinto de caza, nunca podremos enseñarle a caminar a nuestro lado sin correa.
¿Qué expectativas podemos tener tras el entrenamiento?
Los Beagle son cazadores, aunque los tengamos en nuestros apartamentos y queramos que sean perros “citadinos” su espíritu es salvaje. Esto no es algo malo, nuestro perro Beagle siempre querrá cazar, lo disfruta. Una vez que sepa diferenciar entre lo que puede y NO PUEDE cazar podrás convivir sanamente con su instinto de caza.